Un encuentro de ensueño se vivió en el estadio Olímpico Atahualpa donde Liga Deportiva Universitaria venció de manera agónica a El Nacional por 3 goles a 2, en una nueva edición de uno de los duelos clásicos del fútbol ecuatoriano. La hinchada gozó, sufrió y disfrutó en un partido de poder a poder que cualquiera de los dos lo pudo ganar pero al final se lo llevó el cuadro azucena con un gol en el último suspiro del argentino Lucas Acosta, el cual le permite mantener la diferencia con el líder Deportivo Quito.
Uno de los duelos tradicionales del fútbol ecuatoriano tuvo todos los ingredientes para convertirse en un verdadero partidazo. Sí, El Nacional y Liga Deportiva Universitaria se enfrentaron en una batalla de ida y vuelta que contó con un impresionante marco de público que disfrutó a todo momento un choque vibrante que se jugó a mil por hora.
El encuentro arrancó con las revoluciones elevadas. Desde el primer minuto criollos y albos se fueron con todo en busca del arco rival porque sabían que un resultado favorable los mantenía con importantes opciones de seguir peleando por la primera posición de la segunda etapa.
Javier Chila fue el primero en avisar con un remate de media distancia que por poco sorprende al portero Alexander Domínguez. Liga no tardó en responder con un cabezazo débil dentro del área de Hernán Barcos y un disparo mordido de Miller Bolaños que pudo contener con algo de dificultad el cancerbero Danny Cabezas.
Los albos tomaron una leve superioridad en el cotejo y crearon dos nuevas ocasiones claras. Primero un tiro de esquina que en posición solitaria conectó mal de cabeza el defensor Geovanny Caicedo y después un remate seco de Ezequiel González que pasó saludando el parante.
En el mejor momento de Liga, llegó el tanto criollo después de un pase magistral de Marwin Pita para un José Madrid que le ganó las espaldas a los defensores azucenas y sacó un trallazo cruzado, imposible para Alexander Domínguez. Algarabía roja en los graderíos del estadio Olímpico Atahualpa ante una afición blanca que no lo podía creer.
Sin embargo, la alegría del 'Bi-Tri campeón ecuatoriano' duró poco y nada ya que cinco minutos después, un rechazo largo del defensor Geovanny Caicedo fue correctamente aprovechado por el goleador argentino Hernán Barcos, que solo frente al portero Danny Cabezas, decidió bien al sombrerearlo y marcar un empate de categoría.
A partir de los dos goles, ambas escuadras disminuyeron considerablemente su nivel y aunque seguían buscando el arco rival, ya no eran lo suficientemente claros como para provocar el peligro de los minutos iniciales. Con remates de media distancia y centros a las dos áreas, se fueron unos interesantes primeros 45 minutos.
Para la etapa de complemento, el trámite del partido se mantuvo con una gran energía y un destacado nivel técnico que permitió la emoción de todos los asistentes al 'Coloso del Batán'. A los cuatro minutos de iniciada la segunda parte, llegaron malas noticias para Liga ya que su portero titular, Alexander Domínguez, tuvo que abandonar el campo de juego por una lesión. Su reemplazante fue el experimentado Daniel VIteri que no desentonó y cumplió una importante actuación.
Pero como en todo duelo importante, la polémica también siempre está presente, en este compromiso no iba a faltar ya que a los 55 minutos, Ezequiel González, picó un balón profundo hacia el área criolla, el mismo que no pudo conectar Miller Bolaños pero ante el mínimo contacto con el portero Danny Cabezas se dejó caer y provocó que el juez dictamine la pena máxima. Los jugadores criollos discutieron al máximo pero la decisión ya estaba tomada.
El encargado de cobrarlo fue el especialista, Hernán Barcos, que sacó un disparo potente a media altura, al cual no pudo llegar el arquero Cabezas y así se decretó el dos a uno en favor del campeón ecuatoriano. Definitivamente el 'Pirata' ha entrado en racha y quiere aprovecharla al máximo. Después de los cinco goles marcados la semana pasada, esta vez marcó un doblete importante para las aspiraciones de su club.
Al minuto 65, los albos pudieron liquidar el pleito, sin embargo, Miller Bolaños no aprovechó una perfecta devolución de Néicer Reasco y sacó un remate que fue correctamente bloqueado por el arquero Danny Cabezas.
"Quien no hace los goles los ve hacer" es una de las máximas del fútbol la cual se cumplió la tarde de este domingo ya que después de que Liga despilfarró su tercer gol, apareció una vez más Marwin Pita para en esta ocasión asistir a Juan Luis Anangonó, quien controló el esférico dentro del área y sacó un zapatazo cruzado que no pudo bloquear Viteri y se convirtió en el anhelado tanto del empate.
Instantes después del segundo gol militar, ambas escuadras perdieron dos opciones increíbles. Primero Miller Bolaños recibió un nuevo pase magnífico de Ezequiel González y, en posición solitaria, mandó el esférico a las nubes por apresurarse en la ejecución. El Nacional respondió inmediatamente con una internada de Juan Luis Anangonó que culminó con un misil que estremeció el parante del arco azucena.
Después, Anangonó volvió a fallar una chance clarísima al ingresar solo al área rival y en el mano a mano con Viteri mandar el esférico contra las pancartas de publicidad ubicadas detrás del arco.
Ahora quien iba a pagar caro sus errores de definición iba a ser la escuadra roja ya que a un minuto del final del encuentro, Ezequiel González, sacó la varita mágica, observó con paciencia y efectuó un pase de lujo para Lucas Acosta que dentro del área no dudó en cachetear el esférico y conseguir un gol vital para las aspiraciones del último campeón ecuatoriano.
Fiesta blanca en el Olímpico Atahualpa después de un maravilloso partido que se lo llevó el más efectivo. Los albos elevaron sus brazos en son de festejo porque mantuvieron la ventaja de seis puntos con el líder Deportivo Quito y se convirtieron en el único escolta de la segunda etapa. Tristeza en la tienda criolla porque después de haber dado lucha y dejado el alma en el césped, el premio fue nulo en cuanto a puntaje pero grande en cuanto a la satisfacción de su hinchada que los vio defender con honor sus colores hasta el final.
El encuentro arrancó con las revoluciones elevadas. Desde el primer minuto criollos y albos se fueron con todo en busca del arco rival porque sabían que un resultado favorable los mantenía con importantes opciones de seguir peleando por la primera posición de la segunda etapa.
Javier Chila fue el primero en avisar con un remate de media distancia que por poco sorprende al portero Alexander Domínguez. Liga no tardó en responder con un cabezazo débil dentro del área de Hernán Barcos y un disparo mordido de Miller Bolaños que pudo contener con algo de dificultad el cancerbero Danny Cabezas.
Los albos tomaron una leve superioridad en el cotejo y crearon dos nuevas ocasiones claras. Primero un tiro de esquina que en posición solitaria conectó mal de cabeza el defensor Geovanny Caicedo y después un remate seco de Ezequiel González que pasó saludando el parante.
En el mejor momento de Liga, llegó el tanto criollo después de un pase magistral de Marwin Pita para un José Madrid que le ganó las espaldas a los defensores azucenas y sacó un trallazo cruzado, imposible para Alexander Domínguez. Algarabía roja en los graderíos del estadio Olímpico Atahualpa ante una afición blanca que no lo podía creer.
Sin embargo, la alegría del 'Bi-Tri campeón ecuatoriano' duró poco y nada ya que cinco minutos después, un rechazo largo del defensor Geovanny Caicedo fue correctamente aprovechado por el goleador argentino Hernán Barcos, que solo frente al portero Danny Cabezas, decidió bien al sombrerearlo y marcar un empate de categoría.
A partir de los dos goles, ambas escuadras disminuyeron considerablemente su nivel y aunque seguían buscando el arco rival, ya no eran lo suficientemente claros como para provocar el peligro de los minutos iniciales. Con remates de media distancia y centros a las dos áreas, se fueron unos interesantes primeros 45 minutos.
Para la etapa de complemento, el trámite del partido se mantuvo con una gran energía y un destacado nivel técnico que permitió la emoción de todos los asistentes al 'Coloso del Batán'. A los cuatro minutos de iniciada la segunda parte, llegaron malas noticias para Liga ya que su portero titular, Alexander Domínguez, tuvo que abandonar el campo de juego por una lesión. Su reemplazante fue el experimentado Daniel VIteri que no desentonó y cumplió una importante actuación.
Pero como en todo duelo importante, la polémica también siempre está presente, en este compromiso no iba a faltar ya que a los 55 minutos, Ezequiel González, picó un balón profundo hacia el área criolla, el mismo que no pudo conectar Miller Bolaños pero ante el mínimo contacto con el portero Danny Cabezas se dejó caer y provocó que el juez dictamine la pena máxima. Los jugadores criollos discutieron al máximo pero la decisión ya estaba tomada.
El encargado de cobrarlo fue el especialista, Hernán Barcos, que sacó un disparo potente a media altura, al cual no pudo llegar el arquero Cabezas y así se decretó el dos a uno en favor del campeón ecuatoriano. Definitivamente el 'Pirata' ha entrado en racha y quiere aprovecharla al máximo. Después de los cinco goles marcados la semana pasada, esta vez marcó un doblete importante para las aspiraciones de su club.
Al minuto 65, los albos pudieron liquidar el pleito, sin embargo, Miller Bolaños no aprovechó una perfecta devolución de Néicer Reasco y sacó un remate que fue correctamente bloqueado por el arquero Danny Cabezas.
"Quien no hace los goles los ve hacer" es una de las máximas del fútbol la cual se cumplió la tarde de este domingo ya que después de que Liga despilfarró su tercer gol, apareció una vez más Marwin Pita para en esta ocasión asistir a Juan Luis Anangonó, quien controló el esférico dentro del área y sacó un zapatazo cruzado que no pudo bloquear Viteri y se convirtió en el anhelado tanto del empate.
Instantes después del segundo gol militar, ambas escuadras perdieron dos opciones increíbles. Primero Miller Bolaños recibió un nuevo pase magnífico de Ezequiel González y, en posición solitaria, mandó el esférico a las nubes por apresurarse en la ejecución. El Nacional respondió inmediatamente con una internada de Juan Luis Anangonó que culminó con un misil que estremeció el parante del arco azucena.
Después, Anangonó volvió a fallar una chance clarísima al ingresar solo al área rival y en el mano a mano con Viteri mandar el esférico contra las pancartas de publicidad ubicadas detrás del arco.
Ahora quien iba a pagar caro sus errores de definición iba a ser la escuadra roja ya que a un minuto del final del encuentro, Ezequiel González, sacó la varita mágica, observó con paciencia y efectuó un pase de lujo para Lucas Acosta que dentro del área no dudó en cachetear el esférico y conseguir un gol vital para las aspiraciones del último campeón ecuatoriano.
Fiesta blanca en el Olímpico Atahualpa después de un maravilloso partido que se lo llevó el más efectivo. Los albos elevaron sus brazos en son de festejo porque mantuvieron la ventaja de seis puntos con el líder Deportivo Quito y se convirtieron en el único escolta de la segunda etapa. Tristeza en la tienda criolla porque después de haber dado lucha y dejado el alma en el césped, el premio fue nulo en cuanto a puntaje pero grande en cuanto a la satisfacción de su hinchada que los vio defender con honor sus colores hasta el final.
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